Una empresa sueca fundada en 1985 está especializada en desarrollar productos electrónicos inteligentes para hacer la vida más fácil y cómoda. La compañía ha desarrollado detectores de humo que duran hasta 10 años sin tener que cambiar las baterías, así como alarmas de bebé con la radiación más reducida del mercado. Los detectores se conectan fácilmente presionando un botón y tienen conectividad inalámbrica: las alarmas se activan tan pronto como detectan el humo. También es posible conectar un número ilimitado de alarmas. Los detectores tienen diseño escandinavo e incorporan ASIC (circuito integrado para aplicaciones específicas). Sus productos se venden en grandes empresas como IKEA y por distribuidores y agentes en todos los países escandinavos. La empresa ha incrementado las ventas en Suecia y países nórdicos y busca distribuidores en otros países europeos.
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